Los síntomas del actual brote de viruela símica son significativamente diferentes a los de brotes anteriores registrados en regiones africanas, según un nuevo estudio publicado el jueves en la revista British Medical Journal (BMJ).
El estudio analizó a 197 hombres en Londres en mayo-junio que dieron positivo a la enfermedad. Todos los participantes, excepto uno, se identificaron como homosexuales o bisexuales. La viruela símica ha sido un problema de salud pública mundialmente desatendido en algunas partes de África durante décadas, pero en mayo se empezaron a notificar casos fuera de los países donde es endémica. Actualmente, Europa es el epicentro mundial del brote.
Todos los participantes en el estudio sufrieron lesiones, sobre todo en los genitales.
La mayoría (86%) de los pacientes del estudio informaron de una enfermedad sistémica (que afectaba a todo el cuerpo). Los síntomas sistémicos más comunes fueron fiebre (62%), inflamación de los ganglios linfáticos (58%) y dolores musculares (32%).
A pesar de que los informes de casos existentes sugieren que los síntomas sistémicos preceden a las lesiones cutáneas, el 38% de los pacientes desarrollaron síntomas sistémicos después de la aparición de las lesiones mucocutáneas, mientras que el 14% presentó lesiones sin características sistémicas, según la investigación.
Un total de 71 pacientes manifestaron dolor rectal, 33 dolor de garganta y 31 edema de pene, mientras que 27 tenían lesiones orales, 22 tenían una lesión solitaria y 9 tenían las amígdalas inflamadas.
La investigación reveló que el dolor rectal y la hinchazón del pene (edema) se observan comúnmente en el brote actual en comparación con los brotes anteriores en la República Democrática del Congo en 2007-11 y Nigeria en 2017-18. Además, las amígdalas hinchadas y las lesiones solitarias no se conocían previamente como características clásicas del virus y es probable que se diagnostiquen como una condición diferente.
Los investigadores expresaron su esperanza de que los médicos hagan pruebas a los pacientes para detectar el virus de la viruela del mono basándose en estos síntomas.
La viruela símica podría ser una nueva ETS
Los científicos que asesoran a la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la viruela del mono afirman que se está cerrando la ventana para detener su propagación, ya que actualmente los casos se duplican cada dos semanas, lo que hace temer que el brote tarde varios meses en alcanzar su punto máximo.
La OMS Europa ha previsto algo más de 27.000 casos de viruela símica en 88 países para el 2 de agosto, frente a los 17.800 casos en casi 70 países en el último recuento.
El viernes, Brasil informó de la primera muerte relacionada con la viruela del mono fuera del continente africano en el brote actual, poco antes de que España confirmara la primera muerte conocida en Europa en el brote más tarde ese mismo día.
La propagación de la viruela del mono por todo el mundo podría marcar el inicio de una nueva enfermedad de transmisión sexual, aunque algunos expertos médicos afirman que es demasiado pronto para designar oficialmente el virus como tal.
El Dr. Roy Zucker, director de los servicios de salud LGBTQ del Centro Médico Sourasky de Tel Aviv – Hospital Ichilov y médico de los Servicios de Salud Clalit, dijo que si la viruela del mono podría ser designada como una ETS es una “gran pregunta”.
“Sabemos, por datos anteriores, que el virus puede contagiarse estando en presencia de alguien infectado durante mucho tiempo, digamos durante tres horas a una distancia de dos metros más o menos, o simplemente entrando en contacto físico con él”, dijo Zucker a The Media Line. “Pero lo que estamos viendo en todo el mundo y en Israel es que la mayoría de los pacientes se infectaron a través de la actividad sexual”. La OMS también ha dicho lo mismo, que parece que esta enfermedad se transmite por vía sexual y, por tanto, podemos empezar a referirnos a ella como una ETS más”.
No obstante, Zucker añadió que no es del todo seguro que la viruela del mono se clasifique como una nueva ETS porque, aunque es menos frecuente, también puede transmitirse por contacto de piel a piel en situaciones no sexuales.