Hezbolá se prepara para una esperada respuesta israelí después de que el grupo terrorista libanés disparara un cohete que se saldó con la muerte de 12 niños en la ciudad drusa de Majdal Shams. Estados Unidos ha instado a ambas partes a desescalar la guerra. Según fuentes de seguridad, Hezbolá ha evacuado preventivamente algunos sitios clave en el sur del Líbano y en el valle oriental de Bekaa, en preparación para un posible ataque israelí.
El gobierno libanés solicitó a Estados Unidos que pida a Israel ejercer moderación tras el ataque, informó el ministro de Relaciones Exteriores libanés, Abdallah Bou Habib. También señaló que Estados Unidos pidió al gobierno libanés transmitir un mensaje a Hezbolá para que mostrara contención. Líderes israelíes de todo el espectro político exigieron una respuesta rápida y contundente contra Hezbolá tras el impacto del cohete Falaq-1, de fabricación iraní, en un campo de fútbol en Majdal Shams, en los Altos del Golán.
En una conferencia de prensa en Tokio, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, afirmó que “hay todas las indicaciones” de que el cohete fue disparado por Hezbolá, aunque el grupo negó su responsabilidad. “Apoyamos el derecho de Israel a defender a sus ciudadanos de ataques terroristas”, declaró Blinken. Subrayó que un alto el fuego en Gaza es la mejor manera de detener los combates en el norte. “Seguimos trabajando arduamente para un alto el fuego en Gaza, no solo por Gaza, sino también para traer calma duradera a lo largo de la línea azul entre Israel y Líbano. Estamos decididos a poner fin al conflicto en Gaza. Ha durado demasiado y ha costado demasiadas vidas”.
Blinken destacó la importancia de desactivar la guerra no solo para prevenir su escalada y propagación, sino también porque muchas personas en ambos países han sido desplazadas de sus hogares. La administración Biden está “en conversaciones” con Israel, resaltando nuevamente el derecho de Israel a defender a sus ciudadanos y la “determinación de América de asegurarse de que puedan hacerlo” sin que la guerra se extienda. Blinken añadió que la mejor manera de lograrlo de manera sostenida es alcanzar ese alto el fuego en Gaza.
El embajador del Reino Unido en Israel, Simon Walters, calificó el ataque como “especialmente horrendo” porque el objetivo eran niños jugando al fútbol. “Nuestros corazones están con todas las familias de los asesinados o heridos, y con toda la población drusa”, escribió en X. La ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, expresó en X: “Es espantoso que niños y jóvenes que solo querían jugar al fútbol fueran asesinados. Mis condolencias a sus familias”. Baerbock añadió que los ataques pérfidos deben detenerse de inmediato, resaltando la importancia de actuar con cabeza fría, ya que demasiadas personas han muerto en este conflicto.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia condenó enérgicamente el ataque en Majdal Shams, pidiendo que “se haga todo lo posible para evitar una nueva escalada militar”. La ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Melanie Joly, expresó horror por el ataque con cohetes y transmitió sus condolencias a la comunidad drusa en un comunicado. Reiteró la demanda de que Irán y sus grupos terroristas afiliados se abstengan de acciones desestabilizadoras en el Medio Oriente, y expresó preocupación por una posible mayor escalada en la región.
La ministra de Relaciones Exteriores de Australia, Penny Wong, también condenó “inequívocamente” el ataque con cohetes y pidió la desescalada en la región. Wong mencionó que los líderes de Australia, Canadá y Nueva Zelanda manifestaron sus graves preocupaciones sobre una mayor escalada y acciones desestabilizadoras en el Medio Oriente, exigiendo que Irán y sus grupos afiliados, incluido Hezbolá, cesen sus ataques. Añadió que hay una necesidad urgente de un alto el fuego en Gaza.
La embajada de Noruega en Líbano instó a sus ciudadanos a abandonar el país debido a las crecientes tensiones, reiterando las advertencias de viaje existentes. En una publicación en redes sociales en árabe, la embajada señaló que la guerra entre Hezbolá en Líbano e Israel ha escalado, recordando a los ciudadanos noruegos que abandonen el país. Advirtieron que si la situación empeora, las opciones de viaje fuera del Líbano pueden ser limitadas y la embajada tendría recursos muy limitados para ayudar a los ciudadanos noruegos a salir del país.
Desde octubre del año pasado, las fuerzas lideradas por Hezbolá han atacado comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera casi a diario, afirmando que lo hacen para apoyar a Gaza en medio de la guerra. El ataque en Majdal Shams ocurrió en un momento crucial de las negociaciones entre Israel y Hamás para un acuerdo de alto el fuego con rehenes en Gaza, tras avances israelíes en la batalla.
Hasta el sábado, los enfrentamientos con Hezbolá han causado 24 muertes civiles en Israel y la muerte de 18 soldados y reservistas de las FDI. También ha habido varios ataques desde Siria, sin heridos. Hezbolá ha informado que 381 de sus miembros han sido asesinados por Israel durante los enfrentamientos, principalmente en el Líbano, pero algunos también en Siria. Otros 68 operativos de otros grupos terroristas, un soldado libanés y decenas de civiles también han sido asesinados.