La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, declaró el domingo que Rahmanullah Lakanwal, el sospechoso afgano del tiroteo contra dos miembros de la Guardia Nacional en Washington, pudo radicalizarse después de ingresar a Estados Unidos, según informó AFP.
Lakanwal, de 29 años, enfrenta un cargo de asesinato en primer grado por el ataque del 26 de noviembre que provocó la muerte de la guardia Sarah Beckstrom, de 20 años, y causó heridas graves a otra integrante.
“Diré que creemos que se radicalizó desde que llegó a este país”, afirmó Noem en Meet the Press de NBC el domingo.
En otra entrevista en el programa This Week de ABC, añadió: “Creemos que ocurrió mediante conexiones en su comunidad de origen y en su estado, y seguiremos en contacto con quienes tuvieron relación con él, incluidos miembros de su familia, para hablar con ellos”.
Lakanwal entró a Estados Unidos en 2021 como parte del amplio puente aéreo afgano de la administración Biden durante la retirada militar y el ascenso de los talibanes. Residente del estado de Washington, presuntamente cruzó el país para perpetrar el tiroteo a pocas cuadras de la Casa Blanca, lo que conmocionó a los estadounidenses en vísperas del Día de Acción de Gracias.
Funcionarios de la administración del presidente Donald Trump, que supuestamente le concedió asilo a Lakanwal en abril de 2025, responsabilizaron al puente aéreo de Biden por una investigación deficiente. Noem afirmó que Lakanwal “quizás recibió una investigación”, pero “no la recibió”.
En declaraciones publicadas el miércoles por la noche, horas después del tiroteo, Trump describió el hecho como “un acto de terrorismo”.
“Mis queridos compatriotas estadounidenses, hoy temprano, en vísperas del feriado de Acción de Gracias, dos miembros de la Guardia Nacional que prestaban servicio en Washington, DC, recibieron disparos a quemarropa en un monstruoso ataque tipo emboscada a pocos pasos de la Casa Blanca… este atroz ataque constituyó un acto de maldad, un acto de odio y un acto de terrorismo”, expresó Trump.
“Este ataque”, continuó el presidente. “La administración anterior permitió el ingreso de 20 millones de extranjeros desconocidos y sin antecedentes penales de todas partes del mundo, procedentes de lugares sobre los que ni siquiera deseamos obtener información. Ningún país puede tolerar un riesgo semejante para su propia supervivencia”.
“Debemos revisar a cada extranjero que ha entrado a nuestro país desde Afganistán bajo el mandato de Biden y adoptar todas las medidas necesarias para garantizar la expulsión de cualquier extranjero de cualquier país que no pertenezca a este país ni aporte beneficio alguno. Si no pueden amar a nuestro país, no los queremos”, declaró Trump.