Un ataque con drones la semana pasada en Erbil, en la región autónoma kurda del norte de Irak, tiene todas las características de un ataque respaldado por Irán. Los drones han sido utilizados por los proxies de Irán en Yemen, y Teherán los ha exportado a sus socios en Irak, Siria y Líbano.
Irán cuenta con una sofisticada serie de drones, muchos de los cuales son drones kamikaze que funcionan como misiles de crucero. Se asignan coordenadas y luego se les envía a una misión. Irán también utilizó drones en 2018 durante un ataque con misiles contra disidentes kurdos en Irak, y como vigilancia contra el ISIS en Siria.
¿Qué sabemos del ataque a Erbil? Es el tercer ataque contra las fuerzas de la coalición liderada por Estados Unidos en la ciudad. Las milicias proiraníes en Irak, lideradas por Kataib Hezbolá, cambiaron de táctica después de 2019 y 2020 cuando las fuerzas estadounidenses consolidaron sus instalaciones en Irak, retirándose de una serie de bases más pequeñas como Q-West, K-1, Nínive e incluso Tamp Taji. Esto dejó menos objetivos para las milicias iraníes en el vecino del oeste.
Al mismo tiempo, esas milicias, denominadas PMU y que también tienen alas políticas en el gobierno y reciben sueldos gubernamentales, se han visto obligadas a utilizar alias.
Hubo un ataque en Erbil a finales de septiembre de 2020 y otro el 15 de febrero. El reciente ataque fue probablemente un mensaje para Estados Unidos y la nueva administración de Biden. Irán y sus aliados en Irak quieren que Estados Unidos se vaya.
El primer ataque en Erbil había seguido a docenas de otros ataques. Un contratista estadounidense fue asesinado en diciembre de 2019 en Kirkuk y varios miembros de la fuerza fueron asesinados en Camp Taji en marzo de 2020. Los cohetes disparados en 2020 contra Erbil fueron Grads de 122 mm que hicieron poco daño. Sin embargo, el ataque de marzo incluyó cohetes que cayeron sobre numerosos almacenes y dañaron a civiles y contratistas.
El ataque con drones es más misterioso. No se conocen muchos detalles. El portavoz de la coalición liderada por Estados Unidos no ha dado nuevos detalles. “Un dron cargado de TNT tuvo como objetivo una base de la coalición en el aeropuerto de Erbil”, dijo el Ministerio del Interior de la región kurda en un comunicado. Un grupo proiraní que se autodenomina Awliyaa al-Dam (Guardianes de la Sangre), aplaudió el ataque en la aplicación de mensajería Telegram. Los políticos iraquíes señalaron a las milicias proiraníes y a los “terroristas”.
Muchos de los principales políticos iraquíes temen a los grupos respaldados por Irán, que han amenazado al presidente y al primer ministro en el pasado. La poderosa organización Badr tiene tentáculos en las llanuras de Nínive, cerca de Erbil, y su 30ª brigada de la PMU, afiliada a Badr, ha albergado escuadrones de lanzamiento de cohetes que no solo apuntaron a Erbil el año pasado, sino que también apuntaron a una base turca la misma noche del ataque con drones.
Además, el 13 de abril, un día antes del ataque con drones, un grupo en la sombra dijo a Sabereen news que había atacado al “Mossad” en el norte de Irak.
Aunque muchos señalaron que el ataque con drones está probablemente vinculado a Irán, otros también comentaron que se trata de una escalada. “Los drones suicidas son especialmente útiles en este tipo de golpes, ya que pueden evitar los sistemas de contracohetes, artillería y morteros, como el C-RAM”, el sistema desplegado por los estadounidenses para proteger a sus tropas en Arbil y Bagdad, explicó a AFP Hamdi Malik, miembro asociado del Washington Institute.
El informe de AFP incluye otros detalles importantes. No solo se trata del primer ataque con drones contra las fuerzas estadounidenses en Irak, sino que “este método ha sido probado por grupos alineados con Irán en la región”. El artículo alega que el ataque fue llevado a cabo por un dron de fabricación iraní con una envergadura de 15 pies, similar a los utilizados por los Hutíes. Son conocidos como drones de tipo Qasef.
El alto funcionario de defensa estadounidense que habló con AFP lo relacionó con un ataque en enero contra el palacio real de Riad, la capital de Arabia Saudita, supuestamente realizado desde Irak. “Sabemos que el ataque se lanzó… desde el sur de Irak”, añadió el funcionario estadounidense, que habló bajo condición de anonimato.
Esto da a estos drones un alcance de unos 1.500 km. Utilizan el GPS como guía y están preprogramados. “Pueden incluso cargarse en un barco desde Basora”, señala el informe. En enero, otro informe indicó que Irán podría haber suministrado a los Hutíes un dron que tiene un alcance de 2.000 km. y puede llegar a Israel.
Lo que sabemos sobre el ataque con drones a Erbil se suma ahora a la creciente evidencia de que Irán envía drones a Irak y los utiliza contra Arabia Saudita y ahora contra las fuerzas estadounidenses. Por ejemplo, en mayo de 2019 se creía que los ataques contra Arabia Saudita eran planeados por Irán utilizando suelo iraquí. En febrero, AP señaló que “los drones cargados de explosivos que apuntaron al palacio real de Arabia Saudita en la capital del reino el mes pasado fueron lanzados desde el interior de Irak, dijeron un alto funcionario de la milicia respaldada por Irán en Bagdad y un funcionario estadounidense”.
Estados Unidos está construyendo claramente un caso contra Irán por estos ataques. Pero Washington ya tenía muchas pruebas del papel de Teherán en los ataques con drones. En el llamado “zoológico de mascotas” de la Exhibición de Materiales de Irán en la Base Conjunta Anacostia-Bolling, había ejemplos de drones iraníes. Los detalles recopilados por Conflict Armament Research ya relacionaban a Irán, mediante giroscopios, con los drones utilizados en todo Oriente Medio. Las autoridades kurdas también han investigado los ataques de febrero en los que se utilizaron cohetes.
Pero a pesar de todas las investigaciones, se hace poco contra los grupos iraníes porque todos les temen. Estados Unidos teme una escalada, por ejemplo.
La afirmación de que los drones pueden sortear el C-RAM supone otra amenaza para las fuerzas estadounidenses. Estados Unidos envió la defensa aérea Patriot a Irak en 2020 después de que aumentaran los ataques con cohetes. El C-RAM, un arma estadística que dispara un gran número de balas contra una munición entrante, también está en Irak para defender las bases estadounidenses. Pero estas tecnologías anticuadas de defensa aérea tienen dificultades contra los drones, los misiles de crucero e incluso los cohetes.
La Cúpula de Hierro de Israel funciona mucho mejor contra estas nuevas amenazas. Estados Unidos tiene dos baterías de Cúpula de Hierro, pero no hay pruebas de que vaya a desplegarlas en Irak.