La afirmación de Hamás de que “ganó” la última guerra con Israel se ha convertido en objeto de burla y mofa por parte de muchos árabes que no temen denunciar al grupo terrorista respaldado por Irán por mentir a los palestinos y al resto del mundo.
Los árabes tampoco temen responsabilizar a Hamás de la destrucción masiva y la pérdida de vidas de palestinos e israelíes inocentes para servir a los intereses de sus amos en Irán.
Las escenas de palestinos celebrando la “victoria” de Hamás provocaron una ola de condenas en el mundo árabe, especialmente en los Estados del Golfo. Las reacciones de los árabes a la autoproclamada victoria de Hamás demuestran que muchos en el mundo árabe no se dejan engañar por la maquinaria de propaganda del grupo terrorista. Los árabes son conscientes de que el único interés de Hamás es apaciguar a los mulás de Teherán para sacarles más dinero y armas. Los árabes entienden que esto solo es otra farsa de Hamás y en particular de Irán.
El destacado periodista árabe Amjad Taha, experto en asuntos internacionales y popular comentarista en los medios de comunicación y en las redes sociales del Golfo, estalló en carcajadas cuando se le preguntó durante una entrevista televisiva si creía que Hamás había conseguido una “victoria” contra Israel.
“En la guerra de la Franja de Gaza, nadie ganó”, dijo Taha. “Los niños y las mujeres de ambos bandos perdieron. ¿Significa la victoria el uso de mujeres y niños como escudos humanos? ¿Significa la victoria la muerte de 269 palestinos y las heridas de 8.900 en la Franja de Gaza?”.
Taha señaló que algunos de los palestinos muertos durante los 11 días de guerra fueron víctimas de los cohetes de Hamás: “De los 3.700 cohetes lanzados por Hamás [contra Israel], 400 cohetes cayeron en zonas residenciales de la Franja de Gaza y mataron a mujeres y niños”.
“Qué extraño. Vivimos en una época en la que la derrota se ha convertido en victoria. Buen provecho para [el líder de Hamás con sede en Qatar] Ismail Haniyeh por el auto Mercedes, el reloj Rolex y el traje Armani. Buen provecho para Hamás por traficar con la sangre de palestinos inocentes. Como siempre, Haniyeh ganó, el pueblo perdió”.
Haciéndose eco de la creencia generalizada en el mundo árabe de que Irán estaba utilizando a sus proxys palestinos, Hamás y la Jihad Islámica Palestina, para obtener concesiones de Estados Unidos y otras potencias mundiales en las negociaciones de Viena para reactivar el acuerdo nuclear iraní de 2005, Taha añadió
“Las milicias de Hamás en la Franja de Gaza pertenecen a Irán. Lo que estas milicias hicieron recientemente fue servir al Cuerpo de Guardias Revolucionarias de Irán (CGRI). Irán quiere utilizar la cuestión palestina como carta ganadora en las negociaciones de Viena. Irán quiere utilizar la cuestión palestina para obligar a Estados Unidos a levantar las sanciones a Irán a cambio de poner fin a la escalada de seguridad que amenaza a Israel. El terrorista Ismail Haniyeh, afincado en Qatar, dijo: “Agradecemos a Irán que nos dé dinero y armas”. El dinero de Irán está destinado a ayudar a los mercenarios a seguir traficando con la cuestión palestina. Las armas de Irán son para destruir, no para construir”.
Las negociaciones entre Irán y las potencias mundiales sobre el acuerdo nuclear de 2015 se reanudaron la semana pasada en Viena con el objetivo de que Estados Unidos vuelva a participar en el acuerdo.
El periodista y escritor emiratí Mohamed Taqi fue aún más contundente en sus críticas a la supuesta victoria de Hamás y su alianza con Irán.
“La maldición de Dios sobre todos aquellos que explotaron la mezquita de al-Aqsa, la cuestión palestina y el pueblo palestino a cambio de gloria personal y dinero”, dijo Taqi en un vídeo que publicó en Twitter. “La maldición de Dios sobre los traidores que vendieron la cuestión palestina para dársela en bandeja de plata a los mulás de Irán”.
Al igual que muchos árabes, Taqi denunció a los dirigentes de Hamás por vivir con lujo en Qatar y Turquía mientras sacrifican a su propio pueblo en la Franja de Gaza para apaciguar a Irán.
“¿De qué ‘resistencia’ hablas, Haniyeh, cuando tú y tus hijos se alojan en hoteles de Qatar y Turquía?”, preguntó Taqi, dirigiéndose al dirigente catarí de Hamás, que fue visto viajando en un automóvil Mercedes nuevo en Doha durante los combates entre Israel y Hamás.
“¿De qué ‘resistencia’ hablas cuando sacrificas a tu pueblo mientras tú y tus hijos se dan la gran vida? ¿Y luego le pides a los árabes, a quienes has acusado de traición, que reconstruyan la Franja de Gaza mientras tú presentas tu ‘victoria’ a Irán?”.
El escritor y analista político marroquí Saeed Al-Kahel acusó a Hamás de convertir la cuestión palestina en un “activo comercial”.
Hamás, escribió Al-Kahel, “no quiere que el conflicto palestino-israelí termine porque quiere conseguir beneficios políticos y financieros. Hamás ha convertido la cuestión palestina en un activo comercial que genera fondos de diversas fuentes y garantiza la prosperidad y la riqueza de sus dirigentes”.
Al-Kahel también comparte la opinión de que Irán está utilizando la campaña de terrorismo de sus aliados palestinos contra Israel para conseguir que Estados Unidos levante las sanciones a Irán.
“Hamás ha convertido la ‘resistencia’ en una carta de presión en manos de Irán, que la explota en su conflicto con Occidente para levantar las sanciones por su programa nuclear”, escribió Al-Kahel.
“Por tanto, sea cual sea el resultado de la confrontación armada con Israel, Hamás no declarará su derrota. Más bien, la convertirá en una victoria, aunque la celebre entre las ruinas y los ataúdes. Cuantas más muertes y destrucción, más aumentan los ingresos de Hamás mientras los palestinos siguen sufriendo el asedio y la pobreza. Lo peor es que las organizaciones políticas islámicas están orgullosas de la ilusoria victoria conseguida por Hamás. Ninguna de estas organizaciones se ha preguntado por la naturaleza de esta victoria y sus ganancias en beneficio de los palestinos y de su causa: ¿Cuánta tierra fue liberada? ¿Cuántos prisioneros fueron liberados y cuántos refugiados [palestinos] regresaron? Nada de esto se ha conseguido, y no se conseguirá mientras Hamás controle el proceso de toma de decisiones palestino. La sangre palestina se ha vuelto barata para Hamás, así como para el Movimiento Islámico [en Marruecos], cuyos líderes se apresuraron a felicitar a los dirigentes de Hamás por una ‘clara victoria’”.
Samir Ghattas, antiguo miembro del parlamento egipcio y director del Foro Egipcio de Oriente Medio para Estudios Estratégicos, también advirtió del intento de Irán de utilizar a Hamás para obtener beneficios de Estados Unidos y otras potencias mundiales durante las negociaciones de Viena.
Ghattas señaló que Irán intentó desde el primer día de los combates entre Israel y Hamás afirmar su presencia en el campo de batalla emitiendo declaraciones de apoyo a los grupos terroristas palestinos de la Franja de Gaza. Las declaraciones, dijo, incluían una carta enviada por el general de división Esmail Qaani, jefe de la Fuerza Quds de Irán, al archi-terrorista de Hamás Mohammed Deif, en la que se comprometía a apoyar plenamente la guerra palestina contra Israel.
“Irán quiere lograr un progreso cualitativo y fuerte en las negociaciones de Viena, y está jugando la carta de las facciones y milicias que le son leales en la región, Hezbolá en Líbano, los hutíes en Yemen, Hamás y la Jihad Islámica en Palestina para confirmar su fuerza y peso regional”, dijo Ghattas en una clara advertencia a la administración estadounidense y a las potencias mundiales que negocian con Irán. “Irán ha explotado a Hamás y a la Jihad Islámica solo en su propio beneficio, y si quisiera el interés de los palestinos, habría contribuido a la reconstrucción de la Franja de Gaza”, añadió.
“Teherán no ha contribuido ni ha hecho donaciones para proyectos humanitarios o de reconstrucción en Gaza, sino que ha contribuido a financiar la compra de armas y otros para convertir a Gaza en un centro armamentístico que amenaza la seguridad de la región. La reciente guerra de Gaza y las guerras similares que la precedieron en 2008, 2012 y 2014 fueron solo oportunidades que Irán explotó política y militarmente solo para sus propios intereses, no para el interés del pueblo de Palestina y Gaza, sino a costa de su sangre”.
Muhammad Mujahid Al-Zayyat, consultor del Centro Egipcio de Pensamiento y Estudios Estratégicos, dijo que el apoyo de Irán a Hamás durante la guerra con Israel tenía como objetivo enviar un mensaje a Occidente de que los grupos terroristas palestinos se han convertido en una moneda de cambio para Irán en sus relaciones con Occidente.
La reciente guerra de Gaza, argumentó Al-Zayyat, es otro intento de mostrar fuerza por parte de Teherán e insinuar que acudirá a las negociaciones de Viena con una “victoria” de Hamás en sus manos para levantar las sanciones en su contra y conseguir lo que quiere del acuerdo nuclear iraní.
En otras palabras, el experto egipcio se une a otros árabes para advertir a la administración Biden y a las potencias occidentales que no permitan que Irán sea recompensado por la guerra de terrorismo de Hamás contra Israel.
El analista político saudí Abdul Rahman Altrairi también se burló de la afirmación de Hamás de haber ganado la guerra. Señaló que la milicia terrorista iraní Hezbolá, con sede en Líbano, había declarado anteriormente la victoria sobre Israel tras causar una destrucción masiva de las infraestructuras libanesas durante la guerra de 2006 con Israel.
Altrairi recordó a los occidentales que se esfuerzan por apaciguar a Irán que los iraníes son responsables de la “destrucción y la corrupción” en Irak, Líbano, Siria y Yemen.
Altrairi advirtió a Occidente que uno de los objetivos de Irán durante la guerra de Gaza era destruir los tratados de paz entre Israel y algunos países árabes y “reposicionar a Israel como enemigo de los árabes”.
El predicador emiratí Dr. Waseem Yousef también condenó a Hamás por su hipocresía en el trato con los árabes:
“Hamás disparó cohetes desde las casas de la gente, y cuando llegó la respuesta [israelí], Hamás lloró y gritó: ‘Dónde están los árabes, dónde están los musulmanes’. Hamás convirtió Gaza en un cementerio de personas y niños inocentes. Hamás quemó las banderas de la mayoría de los países árabes, insultó a todos los países árabes y no respetó a nadie”.
Resulta refrescante ver las voces del mundo árabe que ridiculizan a Hamás por declarar la victoria contra Israel mientras lleva al desastre a los palestinos de la Franja de Gaza. También es refrescante ver cómo muchos árabes son conscientes de los peligros de la implicación de Irán con los grupos terroristas palestinos que buscan la eliminación primero de Israel y luego de ellos.
Sin embargo, el mensaje más importante que proviene de muchos árabes es el que se dirige a la administración Biden y a las potencias occidentales, alertándolas del hecho de que Irán está tratando de aprovechar la reciente guerra en la Franja de Gaza para intimidarlas para que hagan más concesiones a Teherán. Ahora queda por ver si la administración Biden y las potencias occidentales harán caso a esta advertencia o seguirán escondiendo la cabeza en la arena, pretendiendo que los mulás de Irán, a cambio de sobornos masivos de Estados Unidos, cambiarán mágicamente sus rayas salvajes. No lo hicieron la última vez; ¿qué pasará con la región si vuelven a no hacerlo?