El sábado, las autoridades rusas afirmaron haber derribado drones ucranianos en Crimea, mientras que las autoridades ucranianas afirmaron que las fuerzas rusas continuaron sus ataques contra pueblos del norte y el sur y sus esfuerzos por apoderarse de una de las pocas ciudades del este de Ucrania que aún no está en sus manos.
Las autoridades rusas informaron de que un dron fue derribado por las defensas aéreas locales sobre el cuartel general de la Flota del Mar Negro rusa en Crimea, una zona de Ucrania que Rusia se anexionó en 2014. Tras las explosiones en un aeródromo ruso y en un almacén de municiones en la península este mes, este fue el segundo incidente con un dron en el cuartel general en tres semanas.
El sábado, un asesor del gobernador de Crimea, Oleg Kryuchkov, dijo que los sistemas de defensa aérea en la región se habían activado debido a “ataques de pequeños drones”. No dio más explicaciones. Aunque Rusia ha construido un enorme puente que conecta la península con el territorio continental ruso, los funcionarios ucranianos nunca han reconocido como legítima la anexión rusa de Crimea.
El gobernador de Sebastopol (Crimea), donde se encuentra el ejército ruso del mar Negro, Mikhail Razvozhaev, informó de que nadie resultó herido cuando el dron derribado aterrizó en el tejado del cuartel general de la flota.
Fue un recordatorio de lo vulnerables que son las fuerzas rusas en Crimea. El 31 de julio, un ataque con un dron contra el cuartel general del mar Negro dejó a cinco personas heridas e impidió que el país celebrara el Día de la Armada rusa como estaba previsto.
Esta semana se produjo una explosión en un almacén de municiones ruso en Crimea. Al parecer, nueve aviones rusos fueron derribados la semana pasada en un aeropuerto de Crimea.
El gobierno ucraniano se ha abstenido de hacer acusaciones públicas de culpabilidad. A pesar de que Rusia afirma que la culpa de las explosiones en Crimea fue un “sabotaje”, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, insinuó ataques de las fuerzas ucranianas tras las líneas enemigas.
Mientras tanto, los combates se han intensificado en las últimas semanas en el sur del territorio ucraniano, justo al norte de Crimea, mientras las fuerzas ucranianas intentan expulsar a los soldados rusos de los lugares que han tomado desde los primeros días de la guerra.
El gobernador de la zona de Mykolaiv, Vitaliy Kim, dijo el sábado que al menos nueve personas resultaron heridas y residencias y un edificio de apartamentos fueron dañados en la ciudad de Voznesensk debido a los bombardeos rusos.
Melitopol, la principal ciudad de la zona de Zaporizhzhia bajo control ruso, se encuentra a 100 kilómetros al norte de Crimea, y fue atacada por un bombardeo ucraniano, según funcionarios locales tanto ucranianos como rusos.
El Estado Mayor de las Fuerzas Armadas ucranianas informó el sábado de que los combates se habían recrudecido cerca de la ciudad de Bajmut, un asentamiento menor cuya caída proporcionaría a Rusia un punto de apoyo desde el que atacar las dos ciudades más grandes que siguen en poder de los ucranianos en la región oriental de Donbás.
Rusia ha estado tratando de terminar su campaña de meses para apoderarse de todo el Donbás, donde los rebeldes pro-Moscú han declarado dos repúblicas que Rusia reconoció como entidades independientes al comienzo de la guerra, y Bakhmut ha sido un objetivo principal durante semanas.
Un funcionario de la disputada zona ucraniana de Donbás dijo el sábado que los combates habían continuado cerca de cuatro asentamientos en la frontera entre las provincias de Luhansk y Donetsk. El gobernador de Luhansk, Serhii Haidai, no identificó los asentamientos. El mes pasado, los soldados rusos conquistaron prácticamente la totalidad de Luhansk y, posteriormente, han centrado su atención en recuperar Donetsk de manos de los ucranianos.
El gobernador de la provincia de Donetsk, Pavlo Kyrylenko, publicó en Telegram el sábado que siete civiles fueron asesinados por los bombardeos rusos el viernes, cuatro de ellos en Bakhmut. Con Bajmut en manos de los rusos, estos pueden avanzar hacia las dos principales ciudades en poder de los ucranianos en la zona, Kramatorsk y Sloviansk.
El viernes, el Estado Mayor ucraniano informó de que las ciudades de Sloviansk y Kramatorsk habían sido atacadas, al igual que la zona norte de Kharkiv, donde se encuentra la segunda ciudad más grande del país.
Ni Moscú ni Kiev han comentado el bombardeo sobre Melitopol; sin embargo, Galina Danilchenko, líder de la administración instalada en Rusia en Melitopol, declaró el sábado que la ciudad había sido objeto de fuego ucraniano.
Ivan Ferodov, alcalde de la ciudad ucraniana de Melitopol, ha indicado que su gobierno está recogiendo datos sobre el ataque.
Ferodov ha informado de que durante la noche se escucharon “enormes explosiones en toda la ciudad” de Melitopol. Los datos preliminares sugieren que “(fue) un golpe de precisión contra uno de los puestos militares rusos”, que los fascistas rusos intentan restaurar por enésima vez en la región del aeródromo.
Mientras Rusia se concentra en el este, los dirigentes ucranianos han señalado su intención de lanzar una contraofensiva para retomar el sur tomado.
Durante la noche, las autoridades locales dijeron que los bombardeos rusos se habían reanudado en un amplio frente, golpeando zonas como la región oriental de Dnipropetrovsk y Mykolaiv y las regiones septentrionales de Kharkiv y Sumy, fronterizas con Rusia.