Las fuerzas griegas han comenzado a instalar dispositivos militares que supuestamente pueden nublar la visión de los drones turcos, según el diario Kathimerini.
En un artículo publicado el 1 de julio en el periódico se lee que Grecia está “en el paso final” de la formación de un “paraguas” contra los drones turcos.
Según el artículo, este supuesto paraguas se está instalando en gran secreto y consiste en el sistema “Drone Dome” de fabricación israelí.
El artículo griego afirma que el sistema Drone Dome está hecho de forma que se adapte a las necesidades específicas de Grecia y a la geografía de las islas y otras zonas fronterizas.
“Estos dispositivos militares tienen la capacidad de desorientar los planes de vuelo de los TB-2 ‘Bayraktar’ y ANKA-S cuando están en misiones”, dice.
“Pueden cegar a los aviones no tripulados (UAV) y a los drones”, añadió.
En el pasado, hubo noticias en los medios de comunicación griegos de que se mantuvieron negociaciones con el fabricante israelí Rafael para la compra de “Drone Dome”.
Se afirmaba que estos dispositivos militares eran capaces de detectar con antelación, gracias a su radar de 360 grados, y podían interrumpir las comunicaciones de los UAV con sus estaciones centrales con las interferencias que difundían.
Los vuelos realizados por los UAV turcos en el Egeo durante aproximadamente dos años y medio, han causado graves problemas en la planificación militar de Grecia.
En un artículo publicado en el diario griego Ta Nea, se afirmaba que los UAV turcos pueden vigilar casi a diario tanto los movimientos de los buques de guerra griegos en el Mar Egeo como los puntos de defensa griegos en las islas.
Los drones turcos también se han convertido en un grave problema económico para Grecia.
La Fuerza Aérea Helénica está lanzando sus aviones de guerra F-16 para “detectar” y “repeler” los UAV turcos. Mientras que cada vuelo de los F-16 griegos cuesta miles de euros, los UAV turcos vuelan a bajo coste.
Mientras tanto, Grecia también comprará tres UAV del tipo “MQ-9” a Estados Unidos.
El coste de los UAV del tipo MQ-9 es de unos 400 millones de euros. La carta de intenciones para la compra de dichos UAV se envió a EE.UU. en febrero.
Todavía no se ha decidido si se renovará el contrato para el despliegue de dos UAV del tipo Heron en la isla de Skiros, en el Egeo central, que expirará el próximo año. Los drones fueron alquilados a Israel por 40 millones de euros durante tres años.
Desarrollados por la empresa israelí Rafael Advanced Defense Systems y presentados por primera vez en 2016, los dispositivos militares “Drone Dome” se utilizan para proteger lugares estratégicos como los aeropuertos, que pueden ser objetivo de los UAV y los drones.
Israel está desplegando estos sistemas contra las amenazas de los drones que pueden provenir de la Hezbolá chiíta, el Hamás palestino, las organizaciones de la Yihad Islámica e Irán. Sin embargo, se ha informado de que los dispositivos Drone Dome también se utilizan fuera de Israel.
Se afirmó que el ejército británico llevó temporalmente los dispositivos Drone Dome al aeropuerto londinense de Gatwick en diciembre de 2018, al detectar vehículos aéreos no tripulados no identificados, pero posteriormente se informó de que solo volaban dispositivos domésticos.
No es posible que Grecia neutralice los UAV de Turquía con dispositivos de guerra electrónica que emiten interferencias en cualquier circunstancia.
Si la zona y la ruta utilizadas están predeterminadas, la aeronave vuelve al punto en el que se quedó sin necesidad de recibir órdenes adicionales desde tierra tras el despegue. Por lo tanto, se evita la interferencia de señales externas.
Puede producirse una situación de riesgo si hay un intercambio continuo de comandos entre la estación y el UAV.