El Kremlin niega que el ejército ruso haya utilizado municiones de racimo en Ucrania e insiste en que las fuerzas rusas solo han atacado objetivos militares.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, insiste en que “las tropas rusas no realizan ningún ataque contra infraestructuras civiles y zonas residenciales”.
La afirmación de Peskov contradice las abundantes pruebas documentadas por AP de bombardeos indiscriminados contra viviendas, escuelas y hospitales en toda Ucrania.
Peskov también rechaza las acusaciones de que los militares rusos han utilizado municiones de racimo y armas de vacío devastadoras, desechándolas como invenciones.
En una conferencia telefónica con periodistas, no responde a las preguntas sobre si el Kremlin está satisfecho con el ritmo de la ofensiva y no comenta las bajas militares rusas.
El Ministerio de Defensa ruso dijo ayer por primera vez que ha sufrido pérdidas, pero no citó ninguna cifra.