Enfrentamientos previos al emblemático derbi de fútbol en Tel Aviv ocasionaron múltiples detenciones y disturbios.
Intensa rivalidad en el derbi de Tel Aviv
El derbi de Tel Aviv, enfrentamiento entre Hapoel Tel Aviv y Maccabi Tel Aviv, tuvo un marcador final de 5-0 a favor de Maccabi en el partido del martes.
Este evento deportivo anual genera alta expectación, y esta vez no fue la excepción.
Las acciones tuvieron lugar en el estadio Bloomfield, que sirve de sede a ambos equipos de fútbol.
Incidentes previos al encuentro
Antes del inicio del partido, las autoridades llevaron a cabo inspecciones a los aficionados en busca de contrabando, lo que desencadenó enfrentamientos con la policía.
Esta decisión se tomó después de que, temprano en el día, se descubriera material pirotécnico y armas en un club de aficionados, según informes policiales.
“Durante los controles de seguridad, los aficionados alteraron el orden público”, afirmó un comunicado oficial de la policía.
Resultados de los disturbios
Cerca de 120 individuos fueron arrestados por los desórdenes en las afueras del estadio. Se confiscaron armas, fuegos artificiales y otros objetos ilegales relacionados con el club Hapoel.
El Canal 12 informó sobre la incautación de armas de airsoft y otros objetos metálicos por parte de las autoridades.
Adicionalmente, dos oficiales resultaron heridos por objetos lanzados en medio del caos.
Repercusiones en el inicio del partido
Debido a los altercados, se tomó la decisión de retrasar el inicio del partido por 30 minutos para garantizar la seguridad de todos los presentes.
Reportes indican que, a causa de los controles de seguridad, se generaron aglomeraciones en las entradas, creando situaciones de peligro para los asistentes.
“La gente clamaba por salir debido a la falta de aire”, mencionó un espectador al Canal 12.
Historial de violencia en eventos deportivos
La violencia relacionada con los aficionados no es infrecuente en los partidos de fútbol israelíes.
En un incidente anterior en mayo, hinchas del Beitar Jerusalén irrumpieron en el campo tras una victoria, causando desorden y la evacuación del presidente Isaac Herzog.