Opinión

El discurso destaca el carácter milagroso del Estado de Israel y da la bienvenida a Trump, resaltando su papel clave en el apoyo histórico al país.

Eso fue rápido: de que Hamás no liberara a los rehenes en 72 horas a que Netanyahu detuviera la guerra en 72 segundos.

La amenaza que representan los drones en nuestra frontera sur con Egipto proviene de dos organizaciones criminales.

En 1938, Winston Churchill publicó una recopilación de discursos pronunciados entre 1932 y 1938 en el Reino Unido acerca del rearme alemán y de las declaraciones públicas del régimen nazi sobre su propósito de conquistar Europa.

Israel, situado en la primera línea de la guerra contra la civilización occidental, no combate únicamente por su supervivencia.

De manera singular, el segundo aniversario del 7 de octubre —el día más trágico de duelo para el pueblo judío desde el Holocausto— coincide con el inicio de Sucot.

El presidente Donald Trump visitó recientemente las Naciones Unidas para pronunciar su discurso presidencial anual. Antes de su llegada circularon informes que indicaban que el personal de la ONU había bromeado con desconectar la escalera mecánica para reprender a Trump por sus recortes en la ayuda destinada a determinados programas...

Ochenta años después del Holocausto, cuando seis millones de judíos fueron asesinados mientras el mundo observaba.

El pueblo de Israel no se aferra al papel de víctima. Hamás se queja constantemente, incluso cuando su ideología, la más extrema del mundo, basada en la yihad, promueve el terror. Sin embargo, algunos todavía afirman que Israel es el agresor. Como señaló el artista Enzo Iacchetti: “Aquí no hay...

En el corazón de la identidad judía se encuentra la libertad. El pueblo de Israel nació del clamor eterno: “¡Deja ir a mi pueblo!”.