La guerra en Ucrania continúa en el día 360. Las fuerzas rusas siguen buscando una ruptura operativa, pero a pesar de las gravísimas pérdidas, no están más cerca de conseguirlo.
Bajas rusas en Ucrania: La actualización
Continúan las numerosas bajas rusas. Aunque el ritmo se ralentizó durante los primeros días de la semana (una media de unas 450 bajas al día), las elevadas pérdidas están aumentando de nuevo. Solo en las últimas 48 horas, las fuerzas rusas han perdido casi 2.000 hombres muertos o heridos.
En total, el Ministerio de Defensa ucraniano afirmó que, hasta el sábado, las fuerzas ucranianas habían matado aproximadamente a 142.270 soldados rusos (y herido aproximadamente el doble o el triple).
El material destruido incluye: 298 cazas, aviones de ataque, bombarderos y aviones de transporte, 287 helicópteros de ataque y de transporte, 3.303 tanques, 2.326 piezas de artillería, 6.520 vehículos blindados de transporte de tropas y vehículos de combate de infantería, 469 sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes (MLRS), 18 barcos y cúters, 5, 196 vehículos y tanques de combustible, 243 baterías antiaéreas, 2.016 sistemas aéreos tácticos no tripulados, 223 plataformas de equipos especiales, como vehículos puente, y cuatro sistemas móviles de misiles balísticos Iskander, y 871 misiles de crucero derribados por las defensas aéreas ucranianas.
Las fuerzas rusas tendrán cada vez más dificultades para lograr un avance operativo a medida que pasen los días. Es probable que el Kremlin tenga que recurrir a medidas adicionales de movilización y reclutamiento para hacer frente a las fuertes pérdidas que están sufriendo las fuerzas rusas sobre el terreno. Pero es muy probable que tales medidas provoquen alguna reacción del pueblo ruso, cada vez más cansado de la guerra.
¿Cansancio de guerra?
Se espera que el presidente ruso Vladimir Putin se dirija al pueblo ruso el 21 de febrero en su discurso sobre el estado de la nación.
Uno de los objetivos que probablemente intente alcanzar es reforzar la moral de la población y apoyar su campaña en Ucrania. Los refuerzos de moral serán necesarios si acaba convocando otra movilización. Un reciente informe parlamentario ruso sobre la “operación militar especial” en Ucrania probablemente abarcó cuestiones “como el apoyo social a los movilizados y sus familias”. “Es probable que esta cuestión adquiera mayor relevancia si se produce una nueva movilización (ya sea abierta o tácita)”, evaluó la Inteligencia Militar británica en su última estimación sobre la guerra. “Cada vez es más difícil para el Kremlin aislar a la población de la guerra en Ucrania”. Una encuesta rusa de diciembre de 2022 informaba de que el 52 % tenía algún amigo o familiar que había servido en la llamada Operación Militar Especial”, añadió la Inteligencia Militar británica.
En el otro lado, la situación en Ucrania no podría ser diferente.
Casi a pies juntillas, el pueblo ucraniano respalda a su gobierno y a sus militares. De hecho, están comprometidos a ver el final de esta guerra y apoyar la liberación de cualquier territorio ucraniano actualmente bajo ocupación rusa, incluida la península de Crimea, que fue invadida y anexionada ilegalmente por Rusia en 2014.
Los repetidos ataques rusos con misiles y drones contra centros urbanos e infraestructuras críticas ucranianas no hacen sino reforzar la determinación del pueblo ucraniano. Sin embargo, la determinación del pueblo ucraniano puede endurecer cualquier negociación.